7 de febrero de 2010

Nile "Those Whom the Gods Detest" (2009)

egypt
Así como el Conde Garfield adora Cryptopsy (y yo coincido con él plenamente, una banda del carajo, la verdad), yo no puedo dejar de disfrutar y sorprenderme con estos americanos.
Es increíble que después de tantos años de carrera, y de grandes discos, sigan sorprendiendo. Porque no pasa con todas las bandas. Cannibal Corpse lo hacía antes, aunque desde hace 8 años aproximadamente, no me producen nada sinceramente.
Pero Nile, ellos son distintos. Siguen imbuidos de ese sentimiento que te lleva de viaje por el antiguo Egipto, con cantos de extrañas tonadas orientales, que quedan más que bien en toda la antiquísima violencia que destila el trío. Violencia...más esa aura épica que tiñe todas y cada una de las composiciones, y que le agrega el toque de mítica oscuridad que casi ninguna banda del estilo tiene. De nuevo una especie de interludio instrumental al medio del disco sirve para descomprimir la tensión, aunque genera otra, con esas vocalizaciones extrañas que acompañan el ritual desértico-oriental.
La bestia que se encarga de la batería es el griego George Kollias, realizando un trabajo casi sobrehumano, como el que realiza el guitarrista y líder de la banda, Karl Sanders. Hoy por hoy es uno de los músicos más sorprendentes de la escena Death Metal.
Si quieren seguir escuchando Death Metal con mucha actitud, y extremadamente técnico, y al mismo tiempo para nada aburrido, anoten a Nile (y a Cryptopsy, por supuesto) dentro de los primeros 5 de la lista.
Aquellos a los que los dioses detestan, se vengaron y editaron uno de los mejores discos de su carrera, ofrendando el mismo a la ira politeísta egipcia.
Un gran logro que dichos dioses no reclamen por el momento más sangre humana.

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