Terminamos el año con algo verdaderamente cabeza y extremo, sin ningún tipo de sutilezas, y empezamos el nuevo con esta maravilla noruega atemporal.
La verdad que suena arriesgado darle el estatuto de
clásico a un disco que tiene menos de 12 añitos. Pero no me queda otro camino que ese, lo es para mí, y eso es suficiente.
Es impresionante la diversidad de climas y estilos que hay en este viaje de 50' 11''. Es cierto que el
Black Metal es la base sobre la que se construye su sonido, pero no es el común y corriente.
Como para hacer memoria, por aquellos años ya existían bandas de la talla de
Mayhem,
Borknagar,
Satyricon, Marduk,
Impaled Nazarene,
Immortal,
Enslaved,
Primordial,
Cradle of Filth,
Dark Funeral,
Behemoth,
...And Oceans,
Taake,
Kampfar,
Summoning,
Emperor, los
In the Woods... se estaban separando...o sea, el espectro del estilo ya estaba diversificado y no había una única referencia al
Raw Black.
Música clásica contemporánea, convive sin problemas con el Black más cabeza y pizcas de un
industrial tan cáustico que te hace abrir los ojos y levantar las cejas: pero, ¿que carajo es eso que está sonando? Gritos que bien podrían pertenecer al
Death más cuadrado y distorsionado (tipo Mortician), con recitados a modo de discurso político (y hay muchísimo de
política en la banda y en las letras).
El vértigo que produce cada tema es proporcional a la sorpresa con cada cambio de ritmo y estilo dentro de la misma canción. Escuchen sino el drum'n'bass meterse de prepo en "Speed Increased to Scaffold", que al mismo tiene una dosis de
psicodelia gracias a la cual no hace falta ningún papelito de color para hacerte volar.
Seria locura condensada en menos de una hora, pero que te abre la cabeza a nuevos estilos y a una nueva forma de entender la forma de hacer música extrema. Locura dije, y el track mental salta directo al nº3, "CK II Chanel Nº6", con unas de las intervenciones más reventadas que haya escuchado de los sintetizadores de este dúo noruego.
¿Puede el
Rap mezclarse con el Black y la música
progresiva, sin que nos de un ataque de caspa? De acuerdo a
Solefald y a la canción "Proprietors of Red" no solo se puede, sino que es altamente recomendable.
Como para darnos un breve espacio de respiro, nos enseñan en menos de 2' como sonaría un experimento con Morricone o algunas de esas bandas de sonido Western climáticas y fumonas que había décadas atrás.
Si las instrumentaciones son raras, no se pueden imaginar lo que hacen con sus cuerdas vocales, que parecen de otro mundo.
Sin dejarse influir todavía por el Acid
Jazz de forma evidente, también hay colores que recuerdan a ese estilo, y que no hace que agrandar la paleta de matices de este dúo de maniáticos musicales, cuyo delirio se articula a los sonidos más extraños que te pudieras imaginar.
Las influencias se multiplican exponencialmente, porque surgen sabores prestados del genial
Frank Zappa o de los proyectos más volados de Mike Patton (sobre todo por los distintos rangos vocales cubiertos hábilmente por los dos integrantes).
Como para confirmar el diagnóstico, el neologismo del título, que explica perfectamente que esto, este pedazo de obra de arte, solo tiene sentido para quien lo hizo, mientras que nosotros nos dejamos sorprender ante cada nuevo sentido que aparece en la escucha continua.
Si sos un purista de los géneros y los estilos, y pensás que no se deben mezclar, te jodés, porque este disco no es para vos.
Ahora, si nos leés desde que arrancamos hace unos años, y tenés la mente abierta a nuevas experiencias y sonidos, no podés dejar de escuchar este disco, por más raro o bizarro que pueda parecer al comienzo. Dale tiempo, que vale la pena el esfuerzo.
P.D.: la contraportada es un gran homenaje a esa serie de aventuras y ciencia ficción con marionetas animadas cuadro por cuadro que había hace años, y que ni recuerdo el canal y el nombre de la misma. Así que si quieren ponerse nostálgicos busquen información y veanla que estaba muy buena.
¡Feliz Año a todos!